Una vez escuché a un autor decir, que su última novela la había escrito en el tiempo de tomar una ducha. En esos minutos, un aluvión de ideas de principio a fin le marcaron el libro que escribiría. Hace unos días cayo a mis manos el libro ZEN el arte de escribir de Ray Bradbury , cargado de entusiasmo y vigor a todos los que deseamos escribir. En uno de sus capítulos denominado Invirtiendo centavos: «Fahrenheit 451» nos cuenta cómo llego a concebir tan especial novela. Transcribo sus palabras “En la primavera de 1950, escribir y terminar el primer borrador de El bombero, que más tarde sería Fahrenheit 451, me costó nueve dólares y ochenta centavos, en monedas de diez. Desde 1941 hasta entonces, la mayor parte de mis relatos los había escrito en los garajes de la casa, bien en Venice, California (donde vivíamos porque éramos pobres, no porque estuviera de moda), o detrás de la casa con terreno donde mi mujer Marguerite y yo criamos nuestra familia. Las que me llevaron al garaje fueron ...